Dieta Ayurveda para mes de Noviembre

Noviembre nos trae recuerdos del hogar. El aroma reconfortante sabor del puré de patatas caliente con salsa y la gratitud por la cosecha que se celebra en Acción de Gracias hacen de la comida el centro de Noviembre. Compartir el pan, la comida y la compañía se veneran en noviembre más que en cualquier otra época del año.

El momento del festín es perfecto, ya que el apetito alcanza su punto máximo en noviembre. El cuerpo utiliza las calorías adicionales de las celebraciones navideñas para almacenar grasa, la cual se usará para aislar la piel durante los fríos meses de invierno. Al agradecer externamente el sustento que la comida y la comunidad brindan, internamente el cuerpo agradecerá el calor que una rica dieta de noviembre proporcionará durante todo el invierno.

Sabrás que es noviembre cuando la primera ráfaga de frío te llene de una vitalidad invernal y refrescante. El olor a humo de una casa cercana evoca una cálida noche junto al fuego. Quizás tengas la suerte de vivir en un lugar donde la nieve adorna la tierra con su belleza pura e impoluta. Este tipo de frío es entrañable y nostálgico, invitando al romance y a la diversión invernal.

Psicología

Los días más cortos nos hacen añorar las veladas acogedoras con nuestros seres queridos, una noche tranquila con un libro o reencontrarnos con viejos amigos y disfrutar de todo lo familiar. En noviembre, el corazón se deleita con el placer de un pastel de calabaza o de manzana, preparado como lo hacía la abuela.

Con la llegada del frío y las noches más largas, la atención se centra naturalmente en el hogar y en el interior. Es posible que te sientas más solitario y busques reuniones sociales más íntimas y privadas. Las comidas compartidas y las noches de manualidades ofrecen un entretenimiento más sano que las extravagancias veraniegas. El aroma reconfortante de la sopa casera llena el aire, recordándote todas las comodidades del hogar. Te entra sueño más temprano debido a los días cada vez más cortos y a las comidas más sustanciosas como el puré de patatas, el pollo asado o después de una taza de leche caliente con miel antes de dormir. Incluso la calabaza tiene un efecto sedante, que te induce a la hibernación invernal.

Termina el horario de verano, lo que provoca que anochezca aún más rápido y altera tus biorritmos durante una o dos semanas. El efecto es similar al del jet lag. Date una semana completa para recuperarte del cambio horario planeando un fin de semana tranquilo y reduciendo las actividades sociales nocturnas. Puede que empieces a sentirte un poco encerrado, ya que el frío y la oscuridad te dejan con poco tiempo para disfrutar del aire libre. Quizás requiera esfuerzo y planificación obtener tu dosis diaria de sol, que te levantará el ánimo. Pero no te preocupes, ¡las fiestas están a la vuelta de la esquina! A finales de noviembre estarás muy ocupado preparando todo y posiblemente viajando para Acción de Gracias. A esto le sigue la agitada temporada navideña de diciembre. A principios de noviembre llega la calma antes de la tormenta navideña: disfrútala mientras puedas.

Clima

Pronto el clima será consistentemente frío. Los días húmedos y lluviosos traerán una sensación de frío intenso difícil de superar. La tierra se torna austera en su desolación. Las ventanas permanecerán cerradas a cal y canto mientras la calefacción está al máximo. Esto significa que tu hogar se llenará de aire seco y recirculado. Quizás necesites usar un humidificador para mantener húmedas las vías respiratorias. De lo contrario, corres el riesgo de desarrollar tos seca o incluso hemorragia nasal debido a la sequedad e irritación de las fosas nasales.

Un humidificador puede ser una forma reconfortante de contrarrestar el calor seco en interiores. También puedes usar un difusor de aceites esenciales. Aceites esenciales como el limón, el tomillo, la lavanda y el aceite Thieves, junto con una dieta adecuada a la temporada, pueden favorecer tu salud respiratoria.

Noviembre en tu cuerpo

Las temperaturas gélidas son más constantes, lo que provoca la constricción de los vasos sanguíneos en las extremidades y la superficie de la piel. En esta época del año, la savia deja de fluir por los árboles, justo lo contrario de la primavera, cuando se cosecha el jarabe de arce. La sangre, al igual que la savia de los árboles, se concentra en el torso. Esto se traduce en una disminución del flujo sanguíneo hacia la piel y los músculos, lo que provoca tensión muscular, sequedad en la piel y manos y pies fríos. Por otro lado, una mayor concentración de sangre en el torso implica un mayor flujo sanguíneo hacia el estómago, lo que aumenta el apetito.

Noviembre es una época del año en la que tu cuerpo necesita acumular una capa aislante de tejido adiposo bajo la piel. Para muchos, hacer dieta durante este mes podría debilitar gravemente el sistema inmunitario y provocar resfriados. En cambio, disfruta de la satisfacción y la energía que te dan unos kilos de más. Esta reserva de grasa protegerá tu cuerpo del frío invernal. La necesidad de grasa de tu cuerpo aumenta tu apetito por ella y disminuye tus ganas de hacer ejercicio intenso.

Individuos Vata

En esta época del año, puede que seas especialmente vulnerable a las enfermedades, ya que el cuerpo no está preparado para el descenso de la temperatura. Un frío repentino crea un entorno ideal para la proliferación de virus respiratorios. El ajetreo del organismo deja a las personas con constitución Vata agotadas, con pocas reservas para mantener un sistema inmunitario fuerte. Los resfriados comunes proliferan debido a la deficiencia otoñal, comenzando con síntomas como piel seca, estreñimiento, rigidez en el cuello, mucosidad seca y tos seca. Presta atención a estos síntomas y abrígate bien.

Asegúrate de beber mucha agua caliente durante el día para mantenerte hidratado y de conservar la suavidad de tu piel mediante automasajes regulares con aceite nutritivo Vata . El frío nocturno puede despertarte con ganas de orinar, interrumpiendo tu sueño. El clima frío tiene un efecto diurético, lo que provoca que orines con más frecuencia y hace que la hidratación sea especialmente importante en otoño. Los fuertes vientos que soplan fuera de tu ventana pueden provocar insomnio, sensación de inestabilidad y ansiedad.

Las personas con constitución Vata deben tener especial cuidado de no saltarse comidas. Las sopas y guisos sustanciosos pero fáciles de digerir, ricos en aceites de buena calidad y proteínas animales, satisfacen su necesidad de una capa aislante de grasa durante el invierno.

Pitta y Kapha

Las personas con constitución Pitta y Kapha lo tienen mucho más fácil en noviembre. Los tipos Pitta agradecen el aire fresco y seco, pero necesitarán alimentos más sustanciosos para saciar su voraz apetito y mantenerse estables.

Las personas con constitución Kapha apreciarán la luz, el clima seco y la movilidad de noviembre, pero sufrirán con el frío. Deberán asegurarse de tomar sus alimentos y bebidas calientes y vestirse con varias capas. El trastorno afectivo estacional afecta considerablemente a algunas personas Kapha en noviembre; en ese caso, conviene salir a disfrutar del sol del mediodía. Como un oso preparándose para la hibernación, las largas noches aumentarán su tendencia a dormir en exceso. Deberían limitar sus horas de sueño a entre 6 y 8 por noche.

Rutina ayurvédica para noviembre

Al terminar el horario de verano, la luz del sol escasea. Aprovecha tu hora de almuerzo para dar un paseo corto y disfrutar del sol durante las horas más cálidas del día. Una llamada telefónica también puede ser una buena excusa para salir a caminar. Si necesitas tomar notas durante la llamada, lleva contigo papel y libreta.

El ajetreo de las fiestas puede desbaratar tu rutina diaria. Quizás te convenga reservar tiempo extra en tu rutina para no quedarte atrás cuando surjan imprevistos.

Las personas con constitución Vata y Pitta deben evitar el ejercicio intenso y optar por actividades más suaves y relajantes. Dedica al menos 15 minutos por la mañana a estiramientos suaves, ejercicios de respiración y tu práctica espiritual. Si es necesario, que sea breve y placentera. Acuéstate antes de las 10:00 p. m. y descansa más. Las personas con constitución Vata y Pitta se beneficiarán de una siesta durante el día.

No podemos insistir lo suficiente en esto: ¡mantén una rutina de automasaje con aceites! Si no puedes hacerlo a diario, intenta hacerlo tres veces por semana. Un masaje con aceites (llamado abhyanga ) te ayudará a mantener la piel caliente, fortalecer tu sistema inmunológico y contribuir a que tu cuerpo genere una capa aislante de grasa. Es una práctica ideal para la noche y una buena alternativa a la televisión o la computadora. Elige aceites adecuados para tu dosha, como aceite Vata , aceite Pitta o aceite Kapha . Estos aceites te ayudarán a relajarte y te protegerán del frío. Ten a mano bálsamo labial para prevenir los labios agrietados.

Dieta para noviembre

Debido al marcado descenso de las temperaturas, noviembre marca el punto álgido de la dieta otoñal, la época del año en que el apetito por grasas saludables es mayor. En otoño, las personas con constitución Vata y Pitta pueden disfrutar de una dieta más abundante y rica en grasas. Para cuando llegue noviembre, probablemente tendrás antojo de grasas saludables como mantequilla, ghee, aceite de oliva y frutos secos.

La robustez del trigo y los lácteos también es bienvenida en otoño. Noviembre es el momento ideal para disfrutar de quesos suaves como el feta, el queso de cabra, el yogur y las leches especiadas. Los alimentos sustanciosos, nutritivos y dulces ayudan a mantener el cuerpo sano durante el frío.

Las personas con constitución Kapha podrían excederse en la acumulación de grasa protectora, creando un entorno propicio para la producción de mucosidad espesa a principios de diciembre. La clave para las personas Kapha es la moderación. También pueden disfrutar de alimentos sustanciosos, pero deben controlar las porciones. Seguirán necesitando sabores amargos y especias picantes para mantener una buena circulación sanguínea y levantar el ánimo a medida que los días se acortan.

Si en otoño sientes sequedad, frío y deshidratación, tu cuerpo lo compensará ansiando dulces en lugar de grasas saludables. Estos antojos de azúcar son la forma en que tu cuerpo pide a gritos alimentos grasos y sustanciosos que lo nutran y aíslen del frío. Desafortunadamente, este antojo es una forma de compensar en exceso. El exceso de azúcar refinada puede causar inflamación del tracto gastrointestinal y aumento de peso. En cambio, cuando tengas antojos de dulce en un día frío, elige alimentos ricos en grasas naturales y carbohidratos complejos y sustanciosos.

Hace unos años pasé el otoño en Marruecos, en la antigua ciudad de Fez. Allí no hay calefacción en las casas. En noviembre, una temperatura constante de 10 grados centígrados durante varias semanas me caló hasta los huesos. Noté que en algunos restaurantes empezaban a servir platos de grasa de res con un trocito de carne encima. Nunca había comido un plato entero de grasa, pero tengo que admitir que me sentó de maravilla. Me sentí genial y calentito por primera vez en semanas.

Una de las mejores grasas para nutrir tu cuerpo en otoño es el ghee. Aunque se elabora a partir de la mantequilla, no contiene lactosa. Incluso las personas intolerantes a la lactosa pueden consumirlo y beneficiarse de este aceite nutritivo. Úsalo como aceite principal para cocinar, úntalo en tostadas, añade una cucharadita a la avena y a las sopas. Si bien no recomendamos comerte un plato entero como hacían en Fez, ¡puedes disfrutar de una cucharada!

El aceite y la mantequilla de coco son beneficiosos para mantener una buena regularidad intestinal, aliviar el dolor articular y nutrir la piel. Incorpora una cucharadita de aceite de coco al día a tu dieta, igual que harías con la mantequilla clarificada (ghee). ¡Mezcla la mantequilla de coco con miel para disfrutar del postre más nutritivo que hayas probado!

Noviembre es la época ideal para hornear. Los pasteles caseros son una excelente manera de disfrutar de los alimentos dulces, grasos y ricos en fibra que tanto nos reconfortan en noviembre. Los pasteles de verduras, como el de calabaza, son una mejor opción que los de frutas, y a menudo también son más sustanciosos. Los pasteles son un alimento integral, sobre todo si se elige una base rústica de espelta integral. Para prepararlos, utilice ghee y reduzca a la mitad la cantidad de azúcar que indican las recetas tradicionales. Decore con abundantes frutos secos o incorpórelos a la masa para obtener una opción equilibrada y nutritiva para noviembre, que además incluye proteínas.

Asegúrate de añadir especias cálidas como canela, nuez moscada y clavo a estos platos ricos. Las especias cálidas pueden ayudarte a digerir alimentos grasos. Alimentos que inducen sueño, como cebolla cocida, ajo, pavo, semillas de amapola, nuez moscada y calabaza, ayudan a que tu cuerpo entre en un estado de letargo invernal y pueden calmar la mente dispersa en otoño, especialmente para las personas con constitución Vata. Las salsas pueden añadir sal y aceites a tus platos de verduras para un efecto más satisfactorio y soporífero. Los frutos secos que generan calor de forma natural, como las nueces pecanas, el sésamo y las nueces, crean una sensación de calor en el estómago que favorece un buen descanso nocturno. La sopa de cebolla francesa o el pastel de calabaza, por ejemplo, son un postre perfecto para calmar a las personas con constitución Vata en una somnolienta noche de noviembre.

Noviembre es la mejor época para las aves de corral. El caldo de pollo de la abuela es jugoso, reconfortante, fácil de digerir y rico en grasas saludables, sobre todo si se cocina con los huesos. Un caldo de huesos es muy beneficioso para combatir las deficiencias nutricionales otoñales y también es fácil de digerir.

Prefiere verduras de raíz dulces como zanahorias, patatas y boniatos, junto con cereales integrales y alimentos emolientes como la avena. Asegúrate de que las verduras de hoja verde estén bien cocidas.

Sigue evitando los sabores astringentes y amargos. Esto incluye alimentos crudos y fríos como las ensaladas y alimentos astringentes como las frutas secas, las legumbres, las palomitas de maíz y las patatas fritas. Evita los diuréticos, ya que tus tejidos son propensos a la deshidratación. Los estimulantes siguen siendo demasiado agotadores y desequilibrantes. Evita comer deprisa y saltarte el desayuno. Este es un tiempo para la tranquilidad y una alimentación constante.

Hierbas ayurvédicas para noviembre

Tónicos pulmonares

Cuando la temperatura baja demasiado rápido o el viento sopla con mucha fuerza en noviembre, es posible que te resfríes. Tu cuerpo aún se está adaptando al frío, lo que hace que tu sistema respiratorio sea más vulnerable a resfriados y gripes. Fortalece tu cuerpo con Chyavanprash , un tónico para los pulmones. Las hierbas energizantes de Chyavanprash refuerzan el sistema inmunitario y ayudan a mantener la salud y el bienestar durante todo el año.

El enjuague nasal contiene hierbas que desinfectan y eliminan la mucosidad de las vías nasales. Excelente para la congestión nasal, alergias y resfriados comunes.

Cuando la calefacción reseca las fosas nasales, el aceite Nasya las hidrata. Es útil para la tensión en el cuello y los hombros, y la lentitud mental. El aceite Nasya también ayuda a descongestionar los senos paranasales, fortalece el sistema inmunitario, alivia el dolor de cabeza y mejora la claridad mental y la concentración. Respira libremente con la fórmula clásica del Ayurveda para despejar los senos paranasales, fortalecer la salud respiratoria y revitalizar la mente. Contiene una energizante mezcla de aceite de sésamo, hierbas y aceites esenciales.

La medicina ayurvédica recomienda lavarse los senos nasales a diario, por la mañana y antes de acostarse, con una lota neti . Esto ayuda a eliminar el exceso de mucosidad causado por la congestión y a despejar las fosas nasales de polen y otros alérgenos. Limpia las membranas nasales del polvo, el humo y otros contaminantes presentes en el aire, y alivia la sequedad nasal producida por los viajes en avión.

Fortalece tu sistema inmunológico

Continuarás beneficiándote de hierbas dulces, densas y estabilizadoras como el vidari , la ashwagandha y la raíz de regaliz .

El vidari es denso y untuoso. Es una hierba anabólica rejuvenecedora, útil cuando el Vata está elevado. Ayuda a aliviar la tos y a eliminar la mucosidad. En otoño, el vidari se puede combinar con especias cálidas (como la canela), ya que por sí solo tiene un efecto refrescante.

Para dormir

El tagar es un carminativo untuoso y reconfortante que favorece la digestión. Es estabilizador y conocido por tratar el insomnio. La nuez moscada también es útil si tienes problemas para conciliar el sueño. Añade dos pizcas de nuez moscada a una taza de leche tibia y bébela a sorbos una hora antes de acostarte.

O bien, masajea tu cabeza y pies con aceite de Bhringaraj antes de acostarte para calmar la mente y favorecer un sueño reparador.

Para viajes y ansiedad

Viajar en noviembre puede ser aún más agotador de lo habitual. I Travel Well se formuló específicamente para apoyar las necesidades del viajero moderno. Horarios apretados, mayor exigencia para el sistema inmunológico, cambios de huso horario, alteraciones en las rutinas de sueño y alimentación, y opciones limitadas de alimentos saludables son algunos de los muchos desafíos que se presentan al viajar. Esta poderosa mezcla de hierbas ayurvédicas se creó para ayudarte a sentirte de maravilla durante tus viajes.

«I Travel Well» favorece los mecanismos de adaptación naturales del cuerpo para que tu cuerpo y mente funcionen de forma óptima durante todo el viaje. Ayuda a restablecer patrones de sueño saludables y a fortalecer los sistemas inmunitario, respiratorio y nervioso. Además, contribuye a mantener una buena digestión y a eliminar las toxinas que se acumulan debido a una dieta y un horario irregulares.

La mantequilla clarificada ( ghee) de ashwagandha calma y revitaliza el sistema nervioso. La ashwagandha, uno de los adaptógenos naturales más potentes, apoya al organismo en momentos de estrés, proporcionando un efecto calmante y energizante al sistema nervioso. El ghee actúa como un potente vehículo (yogavahi) de la hierba, dirigiéndola específicamente al sistema nervioso.

La tintura de ortiga ofrece un perfil nutricional excepcional para fortalecer el organismo. En épocas del año en las que la falta de sueño y una mala alimentación pueden debilitar el sistema inmunitario, provocando alergias, resfriados y gripe, incorporar ortigas a la dieta es una forma deliciosa de nutrir el cuerpo.

Hierbas para las fiestas

En esta época del año, los osos entran en una fase llamada hiperfagia, que significa literalmente comer en exceso para acumular una capa de grasa antes de hibernar. Al igual que los osos, con la llegada del frío surgen fuertes antojos, y es posible que tú también comas en exceso.

Conclusión

Sigue estos consejos en noviembre y te asegurarás de mantenerte saludable durante las fiestas, desde el Día de Acción de Gracias hasta Año Nuevo. Prepara tu cuerpo para afrontar las fiestas manteniéndote estable, bien alimentado y descansado.

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